sábado, 5 de mayo de 2007

BOCONÓ: TIERRA DE MONTAÑAS, DE JARDINES Y DE DUENDES MÁGICOS

Boconó es una tierra noble y hermosa, donde sus verdes montañas le dan la bienvenida a la florida ciudad jardín de los andes venezolanos, tal como fue llamada por el Libertador, Simón Bolívar, al pasar por ella en el año de 1813 en su “Admirable Campaña”. Hablamos de la tierra de los ancestrales Cuicas, quienes le dieron el nombre a estos suelos cuando los llamaron Komboc.

De las montañas baja la neblina, acompañado del fresco clima, que hace de los caminos de Boconó, muy refrescantes, mientras se disfruta del color de las tierras del sureste del Estado Trujillo. La Iglesia San Miguel Arcángel de Burucay, construida en mil seiscientos sesenta, es muy visitada por los viajeros, así como el Trapiche Los Clavos, un museo que muestra como se procesaba antiguamente la caña de azúcar, para preparar las dulces panelas.

Pero es su belleza natural, hecha presente gracias a su Río Boconó que baña los bosques de los paramos, lo que le da ese toque fresco y tranquilo a un pueblo que aun mantiene la huella de la colonia, el olor del café, y el sabor de las frutas hacen de este jardín andino un lugar a visitar y contemplar.

Es bueno mencionar que en esta población de Boconó, en oportunidades se llega a escuchar una música dulce pero enigmática que es capaz de capturar la atención de quien la oye, esas melodías que sale de violines y flautas que supuestamente tocan unos diminutos seres que habitan estos valles de la ciudad jardín de los andes venezolanos.

Estos pequeños seres llevan por nombre Momoes o Momoyes, los cuales según el mítico relato, aparecen con mayor frecuencia en horas de la noche para realizar cada una de sus travesuras. Algunos dicen que los Momoes se les aparece solo a quienes se pasan de tragos; pero otros cuentan que estos duendecillos de los andes venezolanos protegen la Laguna de las Parías y la Laguna de Agua Negra, de aquellos que en vez de contemplarla y cuidarla, lo que hacen es maltratarla contaminándola o dañándola.

Quienes los han visto dicen que son muy pequeños, que llevan grandes sombreros, que los acompaña la melodiosa música, y que bajo los efectos de sus travesuras son capaces de llevarse a las montañas a aquellos que por falta de conciencia afectan el equilibrio ecológico del valle de Boconó, por lo que la única forma de no perturbarlos es respetando el medio ambiente de estas altas tierras andinas.
Visitar la página: www.campamentobocono.com/
Fotografías: Campamento Granja Boconó

1 comentario:

emprende con nosotros dijo...

hola gente en enero 2009 empieza una serie de TV en venezuela llamada los momoes por eso me gusto el site porque no sabia solo que lo escuche y me llamo la atencion