No es para nadie un secreto que en el mundo son muchos los viajan a China para ver los Pandas, otros al Polo Norte para ver a los Polares, y otros prefieren ir al norte de los Estados Unidos para ver los Pardos, pero en Venezuela, específicamente en los Andes, se encuentra un oso muy particular y tan espectacular como los ya nombrados, estamos hablando de nuestro Oso Frontino.
Para quienes no lo conocen es un oso cuya característica principal es su color negro y su mancha blanca entre los ojos y el hocico. Llega a tener una altura promedio de un metro y medio, y puede pesar hasta ciento cuarenta kilos, siendo su sitio ideal para dormir y comer lo alto de los árboles.
Esta increíble especie se alimenta de musgo, bromelias, orquídeas, helechos y palmas, aunque se sabe que pueden comer insectos, aves y pequeños mamíferos. Este es un animal que normalmente anda solo, a menos que este acompañado por su pareja en época de celo.
Lo preocupante es que se estima que solo quedan alrededor de dos mil especímenes de estos simpáticos osos venezolanos, los cuales siguen caminando por los paramos, por lo que es difícil encontrarlos cuando uno se encuentra por esos parajes, más sin embargo, son muchos lo que han llegado a oír su rugir de reclamo, que nos recuerda que el merece vivir y para ello hay que mantener el equilibrio que requiere los espacios naturales donde ellos viven.
Los osos frontinos, o de anteojos como también se les conocen, se encuentran en los bosques de los Parques Sierra La Culata, Sierra Nevada y la Sierra de Périja. Incluso se habla de una ruta que va de Mérida hacia el Sur del Lago de Maracaibo, en la cual se puede sentir los pasos, y aun más los sonidos de este personaje de nuestros andes, pero no se deja ver por miedo de ser una víctima más de la caza desmedida.
Uno de los zoológicos venezolanos que se destaca por el cuidado de estos osos en cautiverio es el “Parque Gustavo Rivero”, ubicado en la ciudad de Punto Fijo, Estado Falcón, donde además se registro el primer parto de oseznos gemelos en Latinoamérica. Esto ocurrió en el año de 1997, donde la osa “Googles” (traída desde el Chicago Lincoln Park Zoological Gardens) trajo al mundo a los pequeños “Coro” y “Chiqui”, cuyo padre es el oso criollo “Pacheco”. Es este zoológico junto al Bararida de Barquisimeto que presentan al público a estas especies que están en peligro de extinción.
Esta en nosotros que se mantengan estos simpáticos animales caminando por estos parajes, elevemos nuestra voz hasta lo más alto para que tengamos eternamente Osos Frontinos, que son tan venezolanos como nosotros, y para apoyar esto podemos visitar la pagina http://www.andigena.org/proyecto_oso_andino/ para conocer más de este animal, y además poder enviarles una postal a nuestros amigos para que nos recuerde que todos podemos ser parte de esta campaña.
Para quienes no lo conocen es un oso cuya característica principal es su color negro y su mancha blanca entre los ojos y el hocico. Llega a tener una altura promedio de un metro y medio, y puede pesar hasta ciento cuarenta kilos, siendo su sitio ideal para dormir y comer lo alto de los árboles.
Esta increíble especie se alimenta de musgo, bromelias, orquídeas, helechos y palmas, aunque se sabe que pueden comer insectos, aves y pequeños mamíferos. Este es un animal que normalmente anda solo, a menos que este acompañado por su pareja en época de celo.
Lo preocupante es que se estima que solo quedan alrededor de dos mil especímenes de estos simpáticos osos venezolanos, los cuales siguen caminando por los paramos, por lo que es difícil encontrarlos cuando uno se encuentra por esos parajes, más sin embargo, son muchos lo que han llegado a oír su rugir de reclamo, que nos recuerda que el merece vivir y para ello hay que mantener el equilibrio que requiere los espacios naturales donde ellos viven.
Los osos frontinos, o de anteojos como también se les conocen, se encuentran en los bosques de los Parques Sierra La Culata, Sierra Nevada y la Sierra de Périja. Incluso se habla de una ruta que va de Mérida hacia el Sur del Lago de Maracaibo, en la cual se puede sentir los pasos, y aun más los sonidos de este personaje de nuestros andes, pero no se deja ver por miedo de ser una víctima más de la caza desmedida.
Uno de los zoológicos venezolanos que se destaca por el cuidado de estos osos en cautiverio es el “Parque Gustavo Rivero”, ubicado en la ciudad de Punto Fijo, Estado Falcón, donde además se registro el primer parto de oseznos gemelos en Latinoamérica. Esto ocurrió en el año de 1997, donde la osa “Googles” (traída desde el Chicago Lincoln Park Zoological Gardens) trajo al mundo a los pequeños “Coro” y “Chiqui”, cuyo padre es el oso criollo “Pacheco”. Es este zoológico junto al Bararida de Barquisimeto que presentan al público a estas especies que están en peligro de extinción.
Esta en nosotros que se mantengan estos simpáticos animales caminando por estos parajes, elevemos nuestra voz hasta lo más alto para que tengamos eternamente Osos Frontinos, que son tan venezolanos como nosotros, y para apoyar esto podemos visitar la pagina http://www.andigena.org/proyecto_oso_andino/ para conocer más de este animal, y además poder enviarles una postal a nuestros amigos para que nos recuerde que todos podemos ser parte de esta campaña.
3 comentarios:
Se cree que quedan como 2000 ESPECÍMENES (total de individuos) no ESPECIES. La especie del Oso frontino es una sola. Gracias.
Toda la razón del mundo Vanessa, gracias por informarnos de este detalle que ya ha sido corregido. Gracias a ti.
Pinche vieja mamona la vanessa...
Buena nota! yo apenas acabo de conocer estos simpaticos osos, porque los acabo de ver en discovery channel, senti feo ._.
Porque en la india los usan para ganar dinero, les perforan la nariz con una aguja caliente y les pasan una cuerda que se las dejan toda su vida, los manipulan con esa cuerda para que bailen ._. me dio coraje y lastima...
Pero un señor los esta salvando, lo malo que cuesta aproximadamente 20 mil dolares por oso, ojala mucha gente ayudara para salvarlos.
saludos desde mexico !
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