Hoy como cada 14 de enero se da uno de los movimientos de fe más importantes del planeta, el segundo más grande de América y el primero de toda Venezuela, hablamos de la procesión de la Divina Pastora, la Santa Patrona de los Larenses que sale desde Santa Rosa para recorrer Barquisimeto.
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Para quienes llegan a Barquisimeto ese día el movimiento es hacia Santa Rosa, donde las personas se congregan para escuchar desde la madrugada las santas misas, y desde ahí aproximadamente a las 11:00 a.m. acompañar en una caminata de casi 5 kilómetros a la hermosa Divina Pastora.
La devoción y entrega del pueblo larense por su Santa Patrona se remonta al año de 1736, fecha en la que el párroco de la población de Santa Rosa le encomendó a un escultor que le hiciera una imagen de la Inmaculada Concepción. Aun desconociendo las razones, la Virgen que llegó al pueblo fue la de la Divina Pastora, y a pesar de que el sacerdote quiso regresarla a tierras españolas, esta decisión no se llego a concretar porque nunca pudieron cargar el cajón en donde venía la estatua. Este acontecimiento fue asumido por el pueblo como un milagro en el cual la figura de la Santa Madre mostraba su deseo de quedarse en Santa Rosa.
Pero el milagro más recordado de la Divina Pastora se remonta al siglo XIX, donde en el año 1855 como producto de una epidemia de cólera que afectó a Venezuela, dentro de ellos grandes familias de Barquisimeto, muchos le pidieron a la santa imagen hacer el milagro de acabar con el terrible mal. Se cuenta que el sacerdote José Macario Yépez, párroco de la barquisimetana iglesia de la Concepción, se ofreció ante la Virgen a ser la última víctima de la enfermedad. Parte de la historia dice que seis meses después del ofrecimiento, el sacerdote murió y la epidemia desapareció de la ciudad; para otros la enfermedad culmino el mismo día de la petición.
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El que da amor encuentra amor, y el que entrega los millones de devotos de la Divina Pastora es tan grande que son arropados por el manto de la bendición de la Santa Madre patrona de los larenses, nosotros podemos decir con orgullo que somos una prueba de ello. ¡ Viva la Divina Pastora !
3 comentarios:
Qué lindo post, Carilis, me conmovió tanto volver a leer la historia y recordar desde tus palabras la fe de la gente que, año tras año, le rinde culto a su Pastora...
te mando un besote!!!
aghhh Viajero, que ya te cambié el nombre, sorry!!!
Gracias por visitarnos Azul... La emoción que genera la Divina Pastora es única... su fe se respira en cualquier rincón de la tierra crepuscular... Saludos
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